Los videojuegos de estrategia mejoran la capacidad de los adolescentes para tomar decisiones
Así lo determina un estudio realizado por investigadores de la Facultad de Psicología de la UNC, en el que participaron jóvenes de ambos sexos, de entre 15 y 18 años, de la ciudad de Córdoba. Los resultados indican que el uso de ese tipo de videojuegos potencia su habilidad para adoptar decisiones ventajosas en escenarios de riesgo o frente a situaciones de ambigüedad. Se trata de una exploración inédita a nivel local, que examina esas plataformas lúdicas como herramientas potencialmente estimulantes de las funciones cognitivas. [20.07.2016]
Prosecretaría de Comunicación Institucional – UNC
pablo.carrizo@unc.edu.ar
Durante los últimos años, la industria del videojuego experimentó un crecimiento exponencial en Argentina y el mundo. El vertiginoso aumento del uso de redes sociales y la proliferación de dispositivos móviles, como smartphones y tablets, favorecieron la masividad de los juegos digitales.
Vinculado a esa tendencia, emergió un interés sostenido de diferentes campos de investigación por evaluar el impacto del uso de videojuegos en diversos dominios de nuestra vida social.
En ese marco se inscribe el trabajo “Evaluación de juegos de estrategia en tiempo real como programa de entrenamiento cognitivo en adolescentes”, desarrollado por estudiantes de la Facultad de Psicología de la UNC en el marco de su tesis de licenciatura.
El estudio, inédito a nivel local, fue realizado con adolescentes de ambos sexos, de entre 15 y 18 años, de la ciudad de Córdoba. El mismo comprobó que el entrenamiento con un videojuego de estrategia en tiempo real potencia su capacidad para tomar decisiones ventajosas, en escenarios de riesgo y frente a situaciones de ambigüedad.
Concretamente, a lo largo de las sesiones experimentales, los participantes fueron capaces de captar la información incompleta que el juego brinda y pudieron resolver actividades referidas a la recopilación y gestión de los recursos, la exploración del terreno, como así también atacar o defender. Con esto desarrollaron aptitudes para tomar decisiones bajo situaciones de incertidumbre, a través de estrategias de razonamiento espacio-temporales y de planificación jerárquica.
Sobre la importancia del estudio, Juan Carlos Godoy, docente e investigador de la Facultad de Psicología de la UNC y director de la tesis, expresa: “Este trabajo suma evidencia respecto de la utilidad de los videojuegos para el entrenamiento cognitivo. Si consideramos la necesidad de desarrollar programas de intervención o promoción para la población adolescente, esta tesis muestra que se puede apelar a una tecnología que les resulta ‘familiar’ y cuya implementación se puede pensar tanto para ámbitos escolares como para otros lugares”.
Nuevos estudios para nuevas tendencias
Los resultados del trabajo se insertan en una línea de investigaciones que consideran a los videojuegos como herramientas viables de multi-estimulación cognitiva, capaces de acelerar procesos de aprendizaje y de fortalecer el pensamiento estratégico y la creatividad de los adolescentes.
Particularmente, para elaborar este estudio se trabajó con un diseño experimental pre y pos test, en el que se utilizaron distintas pruebas psicológicas. Algunas se utilizaron como medidas de control como el Cuestionario de patrón de consumo de alcohol y otras sustancias; el Cuestionario STAI, que mide niveles de ansiedad; y el Cuestionario de Impulsividad UPPS-P. Y otras se utilizaron para medir la variable de interés que era la toma de decisiones. Así, se aplicaron la Game of Dice Task (GDT) y la Iowa Gambling Task (IGT) que evalúan la capacidad para tomar decisiones ventajosas o desventajosas en contextos de certidumbre e incertidumbre, respectivamente.
En la instrumentación del diseño experimental se trabajó dividiendo a los participantes en dos grupos, uno de control y otro experimental, y se realizaron medidas antes y después del entrenamiento con el propósito de evaluar mejor los resultados de las pruebas.
Sobre las particularidades metodológicas, Godoy explica: “La lógica de un diseño experimental con medidas antes y después, es la de poder asegurar que todos los participantes –de los dos grupos constituidos- parten de condiciones similares antes de la aplicación de la intervención. La idea, justamente, es que si observamos cambios en el comportamiento después de la intervención, podamos explicarlos como resultado de la misma”.
Fecha de publicación: 20 julio, 2016