Neomaterialismo: un entramado de saberes para interrogar lo humano

Investigadores de la UNC proponen un abordaje interdisciplinario para comprender cómo se reconfiguran las nociones filosóficas de lo humano en la actualidad. Buscan poner en diálogo nuevas conceptualizaciones de las ciencias físico naturales y de las ciencias humanas y sociales. Por la originalidad de la propuesta, el proyecto recibió subsidio y aval de la Universidad de Oxford. [22.09.2016]

Por Pablo Carrizo
Redactor UNCiencia
Prosecretaría de Comunicación Institucional – UNC
pablo.carrizo@unc.edu.ar

¿Qué es lo humano? ¿Cómo repensar la vida humana y su lugar en el cosmos en un contexto de crisis social y ambiental? Un equipo de investigadores con sede en la Facultad de Lenguas de la UNC se propone formular algunas respuestas a esos interrogantes, a través de una experiencia interdisciplinaria.

Con aportes de la filosofía, la sociología, la teología y la ecocrítica -entre otras disciplinas-, el proyecto propone un espacio de diálogo de nuevas conceptualizaciones para vislumbrar la reconfiguración de lo humano en el contexto actual.

Titulado “La concepción de la vida humana y de su lugar en el cosmos según el Neomaterialismo”, el proyecto recibe un subsidio y aval del Ian Ramsey Centre for Sciencie & Religion, un centro de investigaciones de la Universidad de Oxford, Reino Unido, reconocida por ser la más antigua de las universidades anglosajonas.

El proyecto se inscribe conceptualmente en el neomaterialismo, un paradigma filosófico emergente que se propone generar nociones sobre la naturaleza de la materia y el lugar del cuerpo humano, incorporando teorizaciones del campo de las ciencias físicas y naturales.

Materia activa y cuerpos interconectados

Marta Palacio, doctora en Filosofía y directora del proyecto, destaca dos conceptos que pueden abrir un diálogo profundo entre ciencias físico naturales y ciencias humanas y sociales. Subraya los conceptos de “agencia de la materia” y “transcorporeidad”, como posibles ejes transversales para sostener cruces interdisciplinarios fecundos.

“El concepto de agencia de la materia ya tiene un importante desarrollo en el ámbito de las ciencias físico naturales. Propone reconocer la capacidad de acción, de transformación y de productividad que posee la materia. Plantearlo en el campo de las ciencias sociales tiene un impacto muy grande, porque ayuda a superar la concepción moderna de la materia como algo inerte y pasivo”, precisa Palacio.

Por otro lado, la idea de transcorporeidad reconfigura los límites del cuerpo y, por ende, de nuestra condición. “La noción de transcorporeidad proviene de saberes de la física y la química, vinculados a la capacidad de la materia de transformarse en energía y de interpenetrar los cuerpos. Si nosotros lo acercamos a la pregunta por lo que somos, abre posibilidades de plantear una visión holística de interrelación de los cuerpos que expande los límites de la reflexión”, define la directora del proyecto.

Nuestra condición en sus entornos

Mirian Carballo, doctora en Letras e integrante del equipo de investigación, inscribe su trabajo en el campo de la ecocrítica.

“La preocupación central de la ecocrítica son los modos de vinculación de los seres humanos con el ambiente, en directa relación con el proceso de degradación ambiental que sufre nuestro entorno”, define Carballo. Y añade: “Es una disciplina inherentemente transdisciplinaria, que trabaja sobre un corpus de textos culturales muy diversos. Ese corpus siempre es una caja de resonancia, donde ingresan múltiples discursos que portan preocupaciones vigentes sobre cómo somos y cómo nos relacionamos con el entorno”.

Sentidos de la vida humana en los textos religiosos

En el marco del proyecto, se desarrollan líneas de trabajo que indagan los modos en que algunos textos religiosos ponen en debate concepciones de lo humano en relación al planeta y al cosmos.

Sergio Navarro, magister en Ciencias Sociales y miembro del grupo de investigación, realiza un análisis de discurso de la Laudato Si, la segunda encíclica del papa Francisco. En su trabajo analiza la definición del magisterio eclesial sobre la dignidad especial de la persona en el cosmos.

“La Laudato Si puede ser analizada como texto religioso en una dimensión política. Yo trato de indagar como ese documento recoge algunos planteos del neomaterialismo, de la ecología y de la teología latinoamericana y elabora una retórica propia”, especifica Navarro.

Por su parte, María José Caram, doctora en Teología y docente de la Universidad Católica de Córdoba, expresa: “Las nuevas conceptualizaciones están desafiando profundamente a la teología. Creo que tenemos que replantearnos los presupuestos sobre los cuales hemos construido la vida, las relaciones, las instituciones y aprovechar este momento de despertar de una conciencia común para favorecer el desarrollo de una vida sana y armónica para todos”.

Sobre el Coloquio Internacional
Neomaterialismo: la vida humana y su lugar en el cosmos
Miércoles 28 de septiembre. De 9 a 20.
Invitada especial: Samantha Frost (Universidad de Illinois. Estados Unidos).
Auditorio Facultad de Lenguas. Sede Centro: Av. Vélez Sársfield 187.
Más información: http://neomaterialismo.wixsite.com/neomaterialismo
Sobre el proyecto
Título | “La concepción de la vida humana y de su lugar en el cosmos según el Neomaterialismo”
Directora | Marta Palacio
Integrantes | María José Caram, Mirian Carballo, Sergio Navarro, María Victoria Sánchez
Sede | Facultad de Lenguas. Universidad Nacional de Córdoba
Financiamiento | Subsidio y aval del Ian Ramsey  Centre for Sciencie & Religion. University of Oxford

Criaturas y hábitats bioculturales

Criaturas y hábitats bioculturales

Samantha Frost dará una conferencia en el marco del coloquio internacional “Neomaterialismo: La vida humana y su lugar en el cosmos”.

¿Porqué los conceptos de seres bioculturales y biocultural habitats reformulan una nueva concepción de lo humano?

Pensar los humanos como criaturas bioculturales requiere desplazar la noción de que puede haber algún aspecto de un organismo vivo que no esté atravesado por la cultura, y que este pueda persistir por sus propios medios sin interacción, interrelación y transformación con otras sustancias, criaturas y organismos. La idea de hábitats bioculturales impulsa a los académicos a rearticular sus conceptos de culturas humanas y de ambientes materiales para integrarlos en una noción común de un medio en el cual las criaturas vivientes son aculturadas.

En consonancia, trabajar con la idea de hábitats bioculturales es traer a los ámbitos de la “cultura” y el “ambiente” todos los factores químicos, espaciales, térmicos, virales, bacteriológicos y nutritivos, como así todas las prácticas sociales, políticas, psicológicas, estéticas y económicas que –en combinación y a veces con objetivos contradictorios– proveen las condiciones a través de las cuales los humanos bioculturales se convierten en sujetos.

¿Cuáles son las consecuencias teóricas y ético-políticas de este planteo?

La idea de criaturas bioculturales hace imposible pensar los humanos sin pensar también en los hábitats bioculturales que los cultivan. Estos conceptos juntos nos dan las bases para pensar a los humanos como sujetos políticos sin recaer en formas de excepcionalísimo humano que se han apoyado en la negación de su materialidad, corporalidad, animalidad y dependencia. También proveen un marco para desarrollar explicaciones más ricas y detalladas de cómo el mundo material y social son constitutivos de la forma en que vivimos y percibimos nuestras vidas. De este modo, son indicativas de que puede que necesitemos reorientar nuestro entendimiento de la responsabilidad individual y colectiva y nuestro entendimiento de los objetos y dominios de la política.

¿Cuál es la reacción de la academia respecto a estos desplazamientos y rupturas en la definición de la vida humana?

Los conceptos de criaturas bioculturales y hábitats bioculturales conjugan dominios académicos que han tendido a la diferenciación disciplinar en la academia. Un enorme desafío que estos conceptos proponen, entonces, es la reformulación de conceptos y principios metodológicos para que los académicos puedan trabajar transversalmente entre campos de estudio para examinar más plenamente como los humanos moldean y son moldeados por los mundos en los que viven.

Sobre Samantha Frost

Es profesora de teoría política y teoría feminista en la Universidad de Illinois, Urbana-Champaign. Sus investigaciones tempranas se centraban en profundizar en las implicaciones filosóficas, éticas y políticas de la metafísica materialista de Thomas Hobbes.

Estas investigaciones se plasmaron en el libro Lessons from a materialist thinker: Hobbesian reflections on ethics and politics (Stanford UP, 2008). Con posterioridad, se enfocó en articular como los marcos conceptuales materialistas transforman en pensamiento, trabajo que se publica en el volumen coeditado con Diana Coole, New Materialisms: Ontology, Agency, and Politics (Duke UP, 2010). 

Más recientemente, ha comenzado a estudiar biología molecular y celular para poder pensar con sustento sobre la materialidad de los sujetos. Biocultural Creatures: Towards a New Theory of the Human (Duke UP, 2016) es el comienzo de ese proyecto. 

En la actualidad, Frost es Directora del programa de investigación en Biohumanidades situada en el Programa de Investigación en Humanidades de Illinois y financiada con una beca de la fundación Andrew W. Mellon Foundation.